Modelo de gestión de los residuos procedentes de embarcaciones en los puertos pesqueros y deportivos de Cantabriapropuestas de control ambiental

  1. Madariaga Domínguez, Ernesto
Dirigée par:
  1. Emilio Eguía López Directeur/trice
  2. Carlos A. Pérez Labajos Directeur/trice
  3. Juan Carlos Canteras Jordana Directeur/trice

Université de défendre: Universidad de Cantabria

Fecha de defensa: 19 juillet 2010

Jury:
  1. Iñaki Tejero Monzón President
  2. José Antonio Bezanilla Revilla Secrétaire
  3. Fernando Cayuela Camarero Rapporteur
  4. Alexis Dionis Melián Rapporteur
  5. Rafael García Méndez Rapporteur

Type: Thèses

Teseo: 294578 DIALNET lock_openTDX editor

Résumé

RESUMEN: La preocupación por el medio ambiente y las consecuencias que su degradación pueda acarrear a las personas y a los bienes, se ha generalizado en las últimas décadas más que ningún otro sector. En la actualidad, ninguna actividad puede desarrollarse sin respetar el medio ambiente. La gestión de los puertos marítimos no ha sido ajena a esta tendencia y no han escapado tampoco los puertos pesqueros o deportivos donde también es necesario minorar cualquier forma de contaminación si se quieren limitar sus efectos negativos sobre el medio. La preocupación sobre los efectos repercutidos al medio ambiente, importarán los impactos negativos que las actividades pesqueras y de ocio repercutan, sea sobre recursos comunes o sobre el tejido social, a través de riesgos ambientales o sanitarios en sentido amplio, sobre la capacidad del entorno para absorber y regenerar desechos o sencillamente, para producir satisfacciones estéticas o de otro tipo. Los costes derivados de esos impactos dejarán de ser externos al mercado y de ser sufragados por el conjunto de los ciudadanos, ya que afectarán directamente en buena medida, a las empresas turísticas. La calidad ambiental, pasará a ser clave para el éxito de un turismo de calidad y de muchas actividades de ocio, ya que la demanda de entornos no degradados implica la de una calidad ambiental alta, no sólo para turistas en el sentido estricto de la palabra, sino para cualquier “consumidor de ocio”.