Vulnerabilidad migratoria e inseguridad humana. Necropolítica en la frontera sur de la Unión Europea

Zusammenfassung

La investigación realizada brinda una recontextualización de la cuestión migratoria actual. Para ello se abunda en tres marcos teóricos-críticos interrelacionados: los estudios de la vulnerabilidad, la seguridad humana y los enfoques denominados necropolíticos. Las fronteras, tanto territoriales como simbólicas, detentan hoy un potencial mortífero. Un hecho que se ha evidenciado en la última década dada la superposición de crisis de refugiados y emergencias migratorias. Canarias, España y la Unión Europea son los escenarios locales, nacionales y transnacionales en los que se despliega una tragedia necropolítica. La construcción de la inmigración como un escollo político para los gobiernos de los países de destino se encuentra, indiscerniblemente, relacionada con derivas ideológicas que recusan el marco normativo de los derechos humanos. Por un lado, el discurso acerca del Estado-nación se escuda en establecer una demarcación fija entre ciudadanía y “habitantes ilegítimos” del territorio nacional y, por el otro, el neoliberalismo económico global exige la explotación laboral de los inmigrantes, aprovechándose, a menudo, de la irregularidad administrativa como instrumento de acumulación capitalista. En la actualidad, la respuesta de la Unión Europea al hecho de que las migraciones forzadas se encuentren en máximos históricos ha sido intensificar el sistema de vigilancia y control de los movimientos migratorios constituyendo un severo giro securitario. De este modo, este fenómeno global, multicausal y estructural complejo ha pasado a operar al servicio del “deseo de amurallar” según la fantasía política de controlar las fronteras en el mundo actual. Raza, clase social y pobreza y género son elementos que se entrecruzan diferencialmente en la percepción social que estigmatiza a la población migrante. El actual ciclo migratorio es inherente a los procesos y las dinámicas globales, por lo que esta respuesta política destaca por acrecentar la vulnerabilidad y la inseguridad humana para personas migrantes y refugiadas. Achille Mbembe, el filósofo camerunés, ha acuñado la perspectiva necropolítica sirviendo de marco teórico para explicar las derivas genocidas de las políticas migratorias europeas. El resultado de la regulación securitaria como gestión de la inmigración no deseada es un creciente factor de vulnerabilidad, inseguridad humana y sobreexposición, a menudo mortal, a riesgos, en las rutas y en los destinos, para personas migrantes y refugiadas. El análisis de esta deriva necropolítica debe ser contrarrestada desde los principios del Estado de Derecho y la seguridad humana.