Efecto de la administración de cinc en el crecimiento y el desarrollo neurológico de niños prematuros

Resumo

El crecimiento y el desarrollo humano es el resultado de la interacción entre factores genéticos, hormonales y ambientales, especialmente la nutrición. Se sabe que el déficit de cinc en la infancia puede tener una repercusión negativa. En nuestro estudio añadimos suplementos de cinc a una fórmula para prematuros, con mayor contenido en energía y proteínas que las fórmulas adaptadas, con el fin de valorar su efecto en el crecimiento lineal y en el desarrollo neurológico de los niños prematuros. Metodos: 67 niños prematuros participaron en un estudio unicéntrico, prospectivo, de distribución aleatoria, doble ciego, controlado con placebo, en dos grupos paralelos de lactantes siendo aleatorizados al grupo suplementado, alimentado con una fórmula para prematuros suplementada con cinc (1.2 mg/100ml) y cobre (95 µg/100ml) o al grupo placebo que recibió la misma fórmula sin suplementar (0.6 mg/100ml de cinc y 72 µg/100ml de cobre) desde las 36 semanas de edad postconcepcional (EPC) hasta los 4 meses de edad corregida (EC). En las evaluaciones a las 36 y 40 semanas de EPC, a los 3, 6, 9 y 12 meses de EC y a los 2 y 5 años de edad se midieron variables antropométricas, se estimó el agua corporal total (impedancia bioeléctrica). En los controles hasta los 12 meses de edad se obtuvieron muestras de sangre para determinaciones de cobre y cinc. En el control de los 6 meses y de los 2 años se aplicó la Escala Bayley II de Desarrollo Infantil y a los 5 años las Escalas McCarthy de Aptitudes y Psicomotricidad para Niños. 55 niños completaron el estudio hasta los 2 años y 36 hasta los 5 años. Resultados. Las concentraciones séricas de cinc en el grupo suplementado fueron significativamente más elevadas que en el grupo control en las determinaciones realizadas a los 3 meses de EC. No encontramos diferencias en los parámetros antropométricos ni en la composición corporal de ambos grupos a lo largo del estudio. Los valores del índice de desarrollo psicomotor a los 6 meses por las escalas de Bayley II fueron significativamente mayores en el grupo no suplementado. No se obtuvo diferencias estadísticamente significativas en la valoración a la misma edad para el índice de desarrollo mental, tampoco para los índices de desarrollo mental y psicomotor a los 2 años de edad. En la valoración del desarrollo a los 5 años por las escalas de McCarthy la puntuación del índice general cognitivo también fue significativamente mayor en el grupo placebo. Conclusiones. Los resultados de nuestro estudio parecen indicar que cuando se administran, hasta los 4 meses de edad corregida, suplementos de cinc y cobre incorporados a una fórmula para prematuros, no tiene un efecto significativo en el crecimiento. Los datos obtenidos en este estudio son inconsistentes en cuanto al papel de la suplementación con cinc en el desarrollo neurológico de niños prematuros. Son necesarios más estudios, usando diferentes herramientas de medida del desarrollo neurológico, y mayores tamaños muestrales, para obtener conclusiones con base científica el respecto.