Cien años de medicina en Tenerife. La academia de medicina y el colegio de médicos, 1880-1980

  1. GONZÁLEZ YANES, JERONIMO
Dirigida por:
  1. Manuel Hernández González Director

Universidad de defensa: Universidad de La Laguna

Fecha de defensa: 07 de abril de 2006

Tribunal:
  1. Antonio Alarcó Hernández Presidente
  2. Pedro Bonoso González Pérez Secretario
  3. Miguel Angel Cabrera Acosta Vocal
  4. Consuelo Naranjo Orovio Vocal
  5. María José Betancor Gómez Vocal
Departamento:
  1. Geografía e Historia

Tipo: Tesis

Teseo: 131847 DIALNET

Resumen

Se trata de un trabajo inédito sobre el nacimiento y desarrollo de la Academia de Medicina y del Colegio de Médicos de Tenerife, dentro del marco territorial de la isla y del contexto de la época, analizando a su vez las principales instituciones sanitarias, epidemias, profesionales implicados y otras entidades medicas del interés durante esa etapa. Desde la medicina catastrófica de finales del siglo XIX, pasando por las penurais y repercusiones sanitarias ocasionadas por las guerras coloniales, las dos mundiales, la guerra civil y los efectos políticos de gobiernos como las dictadura de Primo de Rivera, II república y dictadura franquista, hasta la creación de la Facultad de Medicina y los modernos centros hospitalarios tenierfeños. En los primeros momentos, la Academia lo es todo, órgano regulador dela profesión médica, asesor de autoridades en materia sanitaria, centro investigador y divulgativo de los avances y descubrimientos científicos, emisor de informes y dictámenes sobre política sanitaria, así como sus miembros forman parte de los tribunales para el acceso de sanitarios aplazas públicas. Con el paso de los años, la Academia va perdiendo competencias hasta mantenerse con las actuales, la literaria y la divulgación de acontecimientos científicos. Por el contrario, el Colegio de Médicos nace para regular la profesión médica y luchar contra el intrusismo en un momento de caos y conflictos de competencias entre los diferentes profesionales sanitarios: veterinarios, farmacéuticos y practicantes, principalmente. La pertenencia a este órgano era obligatoria (al revés de las Academias, que era voluntario) para todos aquellos titulados que quisieran ejercer la profesión médica, aspecto que junto al cobro de patentes y derramas les hizo impopular entre los facultativos. Poco a poco irá adquiriendo nuevas competencias, convertiéndose en el centro de referencia profesional en los ámbitos científicos, profesional, divulgativo.