Holocene vegetation history in the canary islands and its relationship with past climate and human activities
- José María Fernández-Palacios Martínez Director
- Sandra Nogué Bosch Co-director
- Kathy J. Willis Co-director
Universidade de defensa: Universidad de La Laguna
Fecha de defensa: 12 de decembro de 2014
- Henry Hooghiemstra Presidente/a
- José Ramón Arévalo Sierra Secretario
- Cesare Ravazzi Vogal
Tipo: Tese
Resumo
Esta tesis aborda, por primera vez, la reconstrucción de la historia de la vegetación en las Islas Canarias mediante el análisis de polen fósil. Las Islas Canarias ofrecen un escenario excepcional para estudiar el efecto de distintos factores que desencadenan cambios en la vegetación, puesto que son diversas en aspectos de su geografía, geología, biología e historia. Se seleccionaron sitios adecuados para la preservación de fósiles en tres islas: Tenerife, La Gomera y Gran Canaria, donde se obtuvieron secuencias sedimentarias que cubren parte del Holoceno. En cada secuencia se midió el contenido de polen fósil y la concentración de carbón para reconstruir la dinámica de la vegetación y los incendios. Los datos del análisis de la lluvia de polen actual se utilizaron para mejorar la interpretación de la reconstrucción de la vegetación del pasado a partir del registro fósil. Para detectar cambios en la composición de la vegetación se aplicaron análisis estadísticos multivariantes. Se encontraron varios cambios en la vegetación en los tres sitios estudiados, siendo el clima y los humanos los factores más importantes que impulsaron dichos cambios, aunque no afectaron a todos los sitios por igual. Estas diferencias están relacionadas con la edad de las secuencias, la altitud y la historia de asentamiento humano de cada sitio. Por ejemplo, la secuencia de La Gomera fue la más antigua, permitiendo la detección de la respuesta de la vegetación al cambio climático sin interferencia humana. En cambio, Tenerife y Gran Canaria, sufrieron los cambios más significativos tras el poblamiento humano, lo que implicó un aumento de los incendios, la disminución y desaparición de especies, la apertura del bosque, la expansión de herbáceas y arbustos y la introducción de plantas cultivadas. Probablemente, esto es debido a que ambas islas estaban densamente pobladas y eran económicamente más complejas en comparación con La Gomera; además, el área de estudio en La Gomera se encuentra en las zonas más altas de la isla donde el asentamiento humano es poco común, por lo que el bosque se mantuvo prácticamente intacto en esta zona. Los hallazgos paleoecológicos de este trabajo han proporcionado información que podría ser incorporada en ecología y gestión de la conservación de las Islas Canarias. Por ejemplo, por primera vez se detectó la extinción de plantas durante el periodo prehistórico, además, se encontraron varias inconsistencias entre la vegetación natural inferida a partir de datos paleoecológicos y los modelos de vegetación potencial, y se establecieron las líneas de referencia ecológicas anteriores al impacto climático y humano sobre la vegetación.