Influencia de la contaminación vírica y parasitaria del agua de consumo humano del área metropolitana de santa cruz de tenerife en la gastroenteritis aguda en menores de 14 años
- CORONADO ÁLVAREZ, NIEVES MARÍA
- Basilio Valladares Hernández Director
- Enrique Martínez Carretero Co-director
Universidade de defensa: Universidad de La Laguna
Fecha de defensa: 15 de novembro de 2013
- María de los Ángeles Arias Rodríguez Presidenta
- Macrina María Martín Delgado Secretario/a
- Tomás de Haro Muñoz Vogal
Tipo: Tese
Resumo
Los programas de vigilancia sanitaria de los abastecimientos de agua de consumo humano de la Comunidad Autónoma Canaria han tenido un impacto en la mejora de la calidad de la misma, y como consecuencia ha disminuido notablemente la incidencia de enfermedades de origen hídrico y etiología bacteriana. Sin embargo, durante los meses de lluvia aún se detectan brotes de gastroenteritis aguda (GEA) que afectan principalmente a población susceptible como son los niños. Estos brotes son presumiblemente de etiología viral o parasitaria y su presentación epidémica, el patrón epidemiológico y la temporalidad de los mismos, avalan el origen hídrico, hipótesis plausible, dado que estos agentes no son detectados por los análisis habituales de control de calidad del agua. Por ello, intentamos esclarecer si el agua potable del área metropolitana Santa Cruz-La Laguna tenía algún papel en los brotes de gastroenteritis aguda producidos en población infantil durante las épocas de lluvia invernales. Para ello, analizamos la presencia de diferentes virus entéricos y protozoos intestinales en ambos tipos de muestra mediante el empleo de metodología molecular, siendo el primer estudio, en las Islas Canarias, de la contaminación vírica en muestras de agua potable. El 32% (n=100) de las aguas potables analizadas y el 76% (n=108) de las muestras fecales de niños menores de 14 años con GEA, contenían al menos algún microorganismo no bacteriano estudiado; siendo Enterocytozoon bieneusi y Adenovirus humano las especies detectadas con mayor frecuencia en el agua y en las heces, respectivamente. A su vez, se observó un mayor riesgo de contaminación del agua por Adenovirus humano y Enterovirus durante los meses de otoño e invierno; y una asociación estadísticamente significativa entre el consumo de agua potable de la red de distribución del área metropolitana y la GEA por Rotavirus y Adenovirus humano durante los brotes acontecidos durante el período de lluvia invernal confirmando así nuestra hipótesis de trabajo. De todos estos datos podemos deducir que es urgente la dotación de recursos económicos y materiales a los sistemas de tratamiento del agua destinada al consumo humano y a sus controles posteriores para implementar todos aquellos programas ya en marcha y, si fuese necesario, crear otros nuevos, para garantizar la calidad del agua de consumo humano y disminuir la morbilidad y los enormes costes sociales y económicos asociados a las gastroenteritis agudas de etiología no bacteriana en niños.