Consecuencias neuropsicológicas a largo plazo de los traumatismos craneoencefálicos infantiles y su relación con las lesiones cerebrales en resonancia magnética

Resumen

El objetivo de la investigación era determinar las consecuencias neuropsicologicas a largo plazo de los traumatismos craneoencefalicos (TCE) en la infancia. Para ello, se estudiaron 29 niños que habian sufrido un TCE grave hacia al menos 6 años y se compararon con 29 sujetos sanos. Se administraron test de funcionamiento intelectual, memoria, viroespacial y frontal a pacientes y controles. De los pacientes , 27 fueron estudiados mediante un protocolo de resonancia magnetica (RM) con el fin de determinar la relacion entre el rendimiento neursopsicologico y la atrofia cerebral. Se obtuvieron imagenes de RM en 3D. Utilizamos una tecnica computarizada semiautomatica para estimar los volumenes de los ventriculos laterales y del tercer ventriculo, y las areas de las lesiones corticales y de sustancia blanca y de las cabezas de los nucleos caudalos. Los pacientes rindieron significativamente por debajo de sus controles en la mayoria de los tests. Cuando dividimos la muestra de pacientes por edad del TCE (mayor o menor de 8 años) los niños más pequeños difirieron significativamente de sus controles en el funcionamiento intelectual, la memoria procedimental y la funcion visoespacial. El volumen de los ventriculos correlacionó en la dirección esperable con la memoria, l afuncion visoespacial y la funcion frontal. El tamaño del tercer ventriculo correlaciono con tareas de memoria. Los nucleos caudados se relacionaron con la memoria y la funcion frontal. Por lo tanto, existe una relacion entre la degeneracion estructural y la perdida de las funciones de esas estructuras. Nuestros resultados sugieren que la plasticidad cerebral en los niños no compensa todos los efectos producidos por las lesiones cerebrales. En niños, las lesiones unilaterales en el córtex asociativo no se asocian con deficit neuropsicológicos como se observa en adultos. Las lesiones en los ganglios basales producen los déficit esperables: disfunciones frontales.