Reserva cognitiva verbal y no verbalrelación con el rendimiento cognitivo y correlato neuroanatómico

Resumen

El estudio de la reserva cognitiva se ha centrado tradicionalmente en proxies relacionados con las capacidades verbales y que implican una mayor participación del hemisferio izquierdo. En la presente tesis doctoral se investigó la comparación del subtest de Cubos del WAIS con el subtest de Información en su papel de proxies, en relación con el rendimiento cognitivo y con varias medidas globales de neuroimagen, y cómo estas influyen sobre el rendimiento cognitivo. Para ello, se estudió la capacidad de ambos subtest para atenuar el efecto negativo del envejecimiento y de los cambios neuroanatómicos asociados (mediante medidas de sustancia blanca ¿ difusividad media e hipointensidades- y un índice de atrofia global) sobre el rendimiento cognitivo. La muestra estaba formada por participantes de entre 40 y 80 años, con preferencia manual diestra y el estado cognitivo preservado. Se utilizaron modelos de regresión lineal múltiple para determinar el efecto de interacción entre cada uno de los proxies de reserva cognitiva, la edad y las medidas de neuroimagen, sobre el rendimiento cognitivo. Los resultados mostraron que el grupo de mayor edad con alta reserva cognitiva presentó un mejor rendimiento en varios de los dominios cognitivos estudiados, que el grupo de mayor edad con baja reserva cognitiva. De esta forma, una mayor reserva cognitiva minimizó las diferencias entre los grupos de mayor y menor edad en el rendimiento cognitivo. En cuanto a las medidas de neuroimagen estudiadas, ambos subtest atenuaron el efecto de los cambios neuroanatómicos (hipointensidades de sustancia blanca e índice de atrofia global) asociados a la edad sobre el rendimiento en varios dominios cognitivos. Por lo tanto, en la presente tesis doctoral, se demostró que el subtest de Cubos de la Escala de Inteligencia para Adultos de Wechsler puede ser considerado un proxy no verbal de reserva cognitiva, cumpliendo con los tres axiomas propuestos por Stern y Habeck (2018) para ello. Este resultado supone una contribución importante tanto desde la perspectiva de avance del conocimiento como de transferencia para el ámbito clínico, entre las que se encontraría la posibilidad de medir la reserva cognitiva en pacientes con deficiencias verbales y bajo nivel educativo, así como predecir el rendimiento cognitivo en pruebas que no pueden ser administradas a estos pacientes.