Prácticas organizativas para una convivencia satisfactoria en centros de educación infantil y primaria

  1. Espino Peñate, María Luisa
unter der Leitung von:
  1. Ramón Aciego de Mendoza Lugo Doktorvater
  2. Moisés Betancort Montesinos Co-Doktorvater
  3. María del Carmen Muñoz de Bustillo Díaz Co-Doktormutter

Universität der Verteidigung: Universidad de La Laguna

Fecha de defensa: 15 von Januar von 2016

Gericht:
  1. María Dolores García Hernández Präsidentin
  2. Francisco Agustín González Romero Sekretär/in
Fachbereiche:
  1. Psicología Evolutiva y de la Educación

Art: Dissertation

Teseo: 399886 DIALNET

Zusammenfassung

Siguiendo a la Real Academia Española se puede definir la convivencia escolar como la “acción de convivir: vivir en compañía de otro u otros” en el ámbito escolar. En esta convivencia es importante la capacidad de las personas de vivir con otras en un marco de respeto mutuo y solidaridad recíproca, comunicándose y creando un proyecto común de convivencia. También implica el reconocimiento y respeto por la diversidad, la capacidad de las personas de entenderse, de valorar y aceptar las diferencias y los puntos de vista de otro y de otros. Es por ello que la convivencia escolar es un fenómeno complicado dado que son múltiples los factores, agentes y situaciones implicadas (Jimerson y Furlong, 2006; UNESCO, 2004). Los centros y las aulas se convierten en lugares de desarrollo personal y social en el que niños, jóvenes y adultos han de convivir compartiendo unos espacios y un periodo temporal que poseen una estructura organizativa previamente establecida (Ramírez y Justicia, 2006). La organización escolar es un elemento que puede ser utilizado como dinamizador e impulsor de la mejora de la convivencia dado que como plantea Torrego (2004), el diseño y el desarrollo de las medidas organizativas están directamente relacionadas con la mejora de la convivencia en la escuela. Desde esta concepción, según expresa Ortega (2007), la convivencia ha de entenderse, no sólo como la ausencia de violencia, sino principalmente como el establecimiento de relaciones interpersonales y grupales satisfactorias, aspecto éste que se relaciona intrínsecamente con la enseñanza y aprendizaje de las habilidades sociales y con la forma de organización del centro escolar. Detrayendo del estudio de Ortega (2007) la importancia del aspecto organizativo para la convivencia escolar, se descubre un punto débil dentro este marco evolutivo de las investigaciones sobre la convivencia en España y Europa, el cual versa sobre los modestos niveles de investigación que existen en el área de la convivencia escolar y su relación con la organización del centro escolar (Peiró, 2001; Rodríguez, 2005, etc.). Es por ello que nuestro trabajo se centra en profundizar, analizar, valorar y contrastar diversos factores para conocer la relación que se establece entre la organización y la convivencia en los centros educativos.